Diagrama de temas
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- En esta parte estudiaremos un dilatado período de la historia de España que incluye desde la aparición de los primeros individuos de nuestro género hasta el siglo VIII. La llegada de los primeros humanos, la organización de los primeros grupos humanos, la progresiva sucesión de culturas hasta que los romanos unifican el territorio y los visigodos crean una estructura política independiente.
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- La invasión musulmana de la Península crea al-Ándalus aunque pronto la unidad política desaparece con la configuración de unos pequeños núcleos cristianos en el norte. Mientras al-Ándalus alcanza su esplendor durante el califato de Córdoba, los territorios cristianos se consolidan conformando reinos cada vez más amplios y polarizados en torno a Castilla y Aragón (además de Navarra y Portugal).
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- El reinado de los Reyes Católicos es de especial trascendencia para el origen de España al unir personalmente las coronas castellana y aragonesa y completar la Reconquista. Los Austrias conforman además un gran imperio que en el siglo XVII entrará en un irreversible declive.
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- La guerra de Sucesión española finaliza con la introducción de la dinastía borbónica en España, que para el país supone un intento reformista que, no obstante, chocará con las limitaciones del Antiguo Régimen. Con ellos, España cobra un significado más centralista y homogéneo.
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- El bloque 5 analiza el reinado de Fernando VII durante el cual el absolutismo y el resto de los elementos del Antiguo Régimen siguieron vigentes (sociedad estamental, gremios, Inquisición, régimen señorial...). Sin embargo, el liberalismo plantea una alternativa a raíz de la guerra de la Independencia.
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- En el bloque 6 estudiamos el reinado de Isabel II (1833-68) y el Sexenio Democrático (1868-74). Con Isabel triunfa una versión moderada del liberalismo aunque durante el Sexenio se intentará ir más allá al implantar el liberalismo democrático. No faltó la reacción de los defensores del Antiguo Régimen, los carlistas.
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- El bloque 7 se adentra en el regreso a España de un régimen liberal no democrático y de la monarquía en la figura de Alfonso XII. Durante más de dos décadas Cánovas diseña un modelo de Estado estable basado en la Constitución de 1876, el rey soldado, el turnismo o el caciquismo.
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- Hasta ahora hemos estudiado la evolución política de la España del siglo XIX. Sin embargo, hemos dejado de lado otros aspectos interesantes para comprender el período. Este bloque 8 se centra en la economía aunque también hace referencia a temas demográficos y sociales. La España de esta centuria se caracteriza por su atraso, pero ahora vamos a concretar un poco más.
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Llegamos al siglo XX. El modelo político de la Restauración empieza a tambalearse a raíz de la crisis del 98. Los intentos de reforma fracasan y las crisis de 1917 y el desastre colonial en Marruecos desembocan en la dictadura militar de Primo de Rivera. Con el canovismo finiquitado, finalmente las críticas apuntan a la monarquía de Alfonso XIII hasta derribarla y sustituirla por la Segunda República en 1931.
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La Segunda República significaba el éxito de un modelo liberal democrático y reformista que contaba además con el apoyo de buena parte del movimiento obrero y campesino. Sin embargo, su razón de ser se encuentra en el cambio lo cual la hará chocar con los sectores conservadores de la sociedad. Serán estos los que finalmente se rebelen iniciándose la más cruenta contienda civil de nuestra historia.
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La Guerra Civil encumbra la figura del general Franco a la jefatura del Estado que mantendrá durante cuatro décadas de forma dictatorial. Este controvertido período de nuestra historia muestra una evolució desde una concepción próxima al fascismo marcada por la autarquía y las penurias hacia otra aperturista y de fuerte crecimiento económico. La oposición terminaría por organizarse y presionar para que el país retomase la democracia.
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La muerte de Franco daba inicio a la fase de la Transición hacia la democracia que culmina en 1982 con el ascenso del PSOE. España se abre definitivamente al mundo con la entrada en la CEE y durante cuatro décadas ha vivido un período de estabilidad y avances sociales considerables. Sin embargo, la sociedad española se enfrenta a multitud de retos de futuro dentro de un mundo competitivo.